El empuje frecuente del alimento estimula el tráfico de las vacas, aumenta la ingesta de materia seca, favorece la salud de los animales y contribuye a mejorar la producción de leche. Esto también les deja al productor y a sus empleados con menos tareas físicas que consumen mucho tiempo, dándoles más tiempo para dedicarse a otras tareas importantes o a actividades de ocio.
Continúe en contacto con las historias e innovaciones de GEA registrándose para recibir las noticias de GEA.
Registrarse¡Deseamos ayudarle! Solo necesitamos unos datos para responder a su consulta.
Contacte con nosotros